Decoración navideña. Consejos.

Vuelveeeeeeeeeeee, a casa vuelveeeeeeeeeeeee, por Navidaaaaaaaaaaad...

Que bonita es la Navidad, con las luces en las calles que provocan un consumismo feliz entre algún que otro ataque epiléptico, que bonitas las calles y aceras llenas de nieve congelada que nos hace pasar un poco de ridículo cuando nos resbalamos y terminamos en el suelo, doloridos, mojados y humillados, que bonita cuando decoramos la casa con los adornos navideños,... bueno siempre y cuando tengamos buen gusto porque si es una vivienda indigna y además la cagamos con la decoración navideña puede quedar un bodrio elevado al cuadrado. Vease un ejemplo:

El espumillón quedaba chulo en los años 80. Si aún así quieres reciclar los espumillones de la abuela, por favor, no es necesario poner uno en cada cuadro y en cada fotografía de la casa ni tampoco colgar campanitas en ellos. Lo que sí es un buen truco para aprovechar la energía al máximo es envolver la lámpara del techo con un espumillón plateado, de esta manera la lulz se reflejará en él y tendremos una luminosidad digna de Estudio54.

Si no tienes espacio para poner un abeto de navidad en condiciones puedes poner dos, pero mas pequeños, además así podrás utilizar dos diseños diferentes. Que genial, verdad? Vas a ser la mas modelna der barrio. Puedes poner uno mas tradicional, verde con sus lacitos rojos y su pico arriba, ese que pesa tanto que no se sujeta, y luego otro mas modernos en blanco repleto de luces azul intenso (a ser posible con una musiquilla navideña chachi) y espumillón rosa, ese que te sobró de los cuadros y de la lámpara.

Lo que de ninguna manera puede faltar en ningún salón navideño, en estos momentos tan entrañables, es tu gran amor, tu pasión,... no, no son tus hijos, me refiero al cojín de tu club de fútbol favorito, en este caso el del Athletic de Bilbao. Que pasa pues?

visto en fotocasa